Cuando se trata de la primera cita, hay un montón de reglas que la sociedad parece esperar que sigamos. Desde llevar el atuendo perfecto hasta evitar ciertos temas de conversación, es fácil dejarse llevar por la presión de seguir estas pautas. Pero admitámoslo: la mayoría de estas normas son sencillamente estúpidas.
En lugar de centrarnos en lo que debemos o no debemos hacer en una primera cita, ¿por qué no aprovechar la oportunidad de ser auténticos? Al fin y al cabo, ¿no se supone que las citas consisten en eso, en conocerse y establecer una conexión auténtica? Así que desechemos el libro de reglas y olvidémonos de estas nueve ridículas reglas de la primera cita.
1. 1. No hables de política ni de religión. Si bien es cierto que estos temas pueden dividir, también son aspectos importantes de lo que somos. Mantener una conversación significativa sobre nuestras creencias y valores puede ayudarnos a entendernos mejor. Así que no rehuyamos hablar de estos temas si surgen de forma natural.
2. Vestirse para impresionar. Sí, es importante causar una buena primera impresión, pero eso no significa que tengamos que ir vestidos de punta en blanco. Centrémonos más en sentirnos cómodos y seguros con lo que llevamos puesto, en lugar de preocuparnos por si nuestro atuendo cumple con algún estándar arbitrario de «impresionabilidad.»
3. Hazte el difícil. ¿Por qué fingir desinterés o falta de disponibilidad cuando en realidad estamos interesados en conocer a alguien? Seamos sinceros y francos sobre nuestros sentimientos en lugar de jugar a juegos mentales. La autenticidad es mucho más atractiva que un juego del gato y el ratón.
4. Limítate a temas seguros. Las conversaciones en las primeras citas no deberían limitarse a charlas superficiales. Exploremos temas más profundos y significativos que nos permitan conectar a un nivel más profundo. Quién sabe, quizá descubramos pasiones e intereses compartidos que nos unan más.
5. Esperar a que la otra persona dé el primer paso. ¿Por qué esperar a que otro tome la iniciativa cuando podemos tomarla nosotros? No tengamos miedo de mostrar interés y dar el primer paso. La confianza es atractiva, y puede conducir a una conexión más igualitaria y equilibrada.
6. No reveles demasiado sobre ti. Por supuesto, no hace falta que compartamos nuestros secretos más oscuros en una primera cita, pero tampoco hay por qué contenerse. Seamos abiertos y honestos sobre quiénes somos y qué buscamos. La vulnerabilidad puede conducir a conexiones más profundas y relaciones más satisfactorias.
7. Seguir un calendario estricto. ¿Quién dice que una primera cita tiene que ajustarse a un calendario concreto? Dejémonos llevar y dejemos que la cita avance de forma natural. Si lo estamos pasando bien, ¿por qué precipitarnos? Y si no va bien, no nos sintamos obligados a aguantar. Nuestro tiempo y energía son valiosos y deberíamos emplearlos en conexiones que merezcan la pena.
8. No demuestres demasiado afecto. Aunque es cierto que las primeras citas sirven para conocerse, no hay por qué reprimir los sentimientos genuinos de afecto. Si sentimos una conexión y queremos expresarla, hagámoslo. La vida es demasiado corta para hacerse el interesante todo el tiempo.
9. No menciones relaciones pasadas. Nuestras relaciones pasadas han dado forma a lo que somos hoy, y es natural que salgan a relucir en una conversación. No rehuyamos hablar de nuestro pasado, siempre que no nos detengamos en él. Puede ser una forma estupenda de entender las experiencias de los demás y aprender de nuestros errores.
Así que olvidémonos de esas tontas reglas de la primera cita y centrémonos en construir conexiones genuinas basadas en la autenticidad y el entendimiento mutuo. Al fin y al cabo, el amor verdadero no surge de marcar todas las casillas de una lista de comprobación, sino de ser fieles a nosotros mismos y encontrar a alguien que nos aprecie por lo que realmente somos.
1 Falda arriba, escote abajo.
A la hora de vestirse para una primera cita, hay algunas pautas que pueden ayudarte a causar una buena impresión. Sin embargo, algunas de estas normas pueden ser bastante ridículas e innecesarias. Una de esas reglas que hay que olvidar es la idea de que debes llevar una falda corta y enseñar el escote para atraer a tu cita.
Aunque es cierto que vestirse bien y con confianza puede aumentar tu autoestima y hacerte sentir más atractiva, es importante recordar que no necesitas revelar demasiado para causar una buena impresión. Es mucho más importante centrarse en sentirse cómodo y genuino que intentar ajustarse a las expectativas sociales de lo que se considera sexy.
En lugar de preocuparte por lo corta que es tu falda o por el escote que muestras, piensa en vestirte de un modo que refleje tu estilo personal y te haga sentir segura de ti misma. Ya sea con unos vaqueros y un top bonito o con un vestido que te haga sentir fabulosa, lo más importante es que te sientas cómoda y fiel a ti misma.
Recuerda que lo más probable es que tu cita esté más interesada en conocerte como persona que en tu aspecto físico. Así que, en lugar de obsesionarte con el dobladillo o el escote, céntrate en entablar una conversación significativa y disfrutar de la compañía del otro.
En conclusión, no te preocupes por la idea anticuada de que tienes que llevar una falda corta y enseñar el escote en una primera cita. Vístete de forma que te sientas segura y cómoda, y deja que tu personalidad brille con luz propia. Al fin y al cabo, la mejor primera impresión es la que da una persona auténtica y fiel a sí misma.
2 Quien lleva a la dama al restaurante, paga.
Tradicionalmente, ha sido norma común que la persona que invita a otra a un restaurante corra con los gastos. En el contexto de una primera cita, esta regla suele recaer en la persona que inició la cita o hizo la reserva en el restaurante.
Sin embargo, en la cultura moderna de las citas, la expectativa de quién paga se ha vuelto más flexible y puede variar en función de las personas implicadas. Algunas personas prefieren repartirse la cuenta a partes iguales, mientras que otras pueden turnarse para pagar en diferentes citas.
Es esencial comunicar y discutir las expectativas financieras antes de la cita para evitar cualquier confusión o incomodidad. Esto puede demostrar respeto y consideración mutuos, permitiendo que ambas personas se sientan cómodas y disfruten de la experiencia sin preocuparse por el aspecto financiero.
Recuerde que la prioridad en una primera cita debe ser conocerse y disfrutar de la compañía del otro. Aunque lo habitual es que pague la persona que ha invitado a la otra al restaurante, en última instancia todo depende de las preferencias personales y del acuerdo al que lleguen las personas implicadas.
En última instancia, lo más importante es que ambas partes se sientan respetadas y valoradas durante toda la cita. Se trata de una experiencia compartida, y encontrar un acuerdo de pago que funcione para ambas personas puede contribuir a que la primera cita sea positiva y agradable.
3 El tema de los ex: tabú
Un tema que siempre debe evitarse en una primera cita es hablar de los ex. Es una regla bien conocida, pero es sorprendente cuánta gente sigue cometiendo el error de sacar el tema. Mencionar a los ex puede traer una carga innecesaria e incomodidad a la conversación, arruinando potencialmente toda la cita.
¿Por qué es una mala idea hablar de los ex?
En primer lugar, hablar de los ex puede indicar a tu cita que no has superado tu relación anterior. Esto puede crear una sensación de inseguridad y hacer que tu cita dude de si estás preparado para una nueva relación. Es mejor centrarse en el presente y el futuro que en el pasado.
Además, hablar de los ex puede dar lugar a comparaciones. Tu cita podría empezar a compararse con tus anteriores parejas, provocando sentimientos de inadecuación o celos. Esto puede enrarecer rápidamente el ambiente y hacer que tu cita se sienta incómoda.
¿Cómo evitar el tema de los ex?
La forma más fácil de evitar el tema de los ex es simplemente no sacarlo. Céntrate en conocer a tu cita, sus intereses y sus aspiraciones futuras. Mantén una conversación desenfadada y positiva. Recuerde que la primera cita es una oportunidad para causar una buena impresión, así que es mejor evitar cualquier tema potencialmente delicado.
Si tu cita saca el tema de los ex, intenta dirigir la conversación en otra dirección. Cambie de tema amablemente y reoriente la conversación hacia un tema más agradable. Por ejemplo, puedes preguntarle por sus aficiones favoritas o por sus últimos viajes.
Conclusión
Hablar de los ex en una primera cita es un gran paso en falso en las citas. Es mejor evitar el tema por completo para garantizar una experiencia positiva y cómoda. Céntrate en el presente y el futuro, y dale a tu cita la oportunidad de conocer a la increíble persona que eres ahora, en lugar de obsesionarte con tus relaciones pasadas.
4 En cualquier situación, lo principal: poner buena cara
Cuando se trata de la primera cita, a menudo nos dejamos llevar por la emoción y los nervios. Sin embargo, sea cual sea la situación, siempre es importante poner buena cara. Demuestra que estás atento, interesado y comprometido con la conversación. A continuación te damos algunos consejos para que mantengas esa cara elegante durante toda la cita:
Presta atención
Una de las claves para poner buena cara es prestar atención a lo que dice tu cita. Evita distracciones como el teléfono o mirar alrededor de la habitación. Mantén el contacto visual y asiente con la cabeza para demostrar que estás escuchando.
Muestra curiosidad genuina
Otro aspecto importante de poner buena cara es mostrar auténtica curiosidad por las historias e intereses de tu cita. Haga preguntas, comparta sus propias ideas y haga que la conversación fluya con naturalidad. Esto no sólo demuestra que estás interesado, sino que también garantiza una conversación más amena y atractiva.
Recuerde que el objetivo no es impresionar a su cita con sus conocimientos o su inteligencia. Se trata de estar presente y genuinamente interesado en conocerle mejor.
Ten en cuenta que poner cara de listo no consiste en fingir ser alguien que no eres. Se trata de ser auténtico y demostrar que valoras la conversación y a la persona que tienes delante.
Así que, en cualquier situación, recuerda poner buena cara y dejar que la conversación fluya con naturalidad. Esto garantizará una conexión más significativa y una primera cita exitosa.
5 La chica en la primera cita: una fortaleza inexpugnable
La primera cita puede ser angustiosa, sobre todo cuando se trata de romper los muros que la chica ha levantado. A menudo puede parecer que es una fortaleza inexpugnable, lo que dificulta conectar con ella a un nivel más profundo. Sin embargo, si comprendes su perspectiva y das ciertos pasos, podrás ir desmontando poco a poco esas defensas y construir una conexión más fuerte.
1. Sé paciente y comprensivo
Es importante recordar que cada persona tiene sus propias experiencias y razones para levantar muros. No te desanimes si la chica parece reservada o distante. Ten paciencia y trata de entender de dónde viene. Muestra empatía y compasión hacia sus sentimientos y experiencias. Al demostrarle que estás dispuesto a tomarte el tiempo para entenderla, es más probable que derribes esos muros.
2. Cree un entorno seguro y cómodo
Cuando se tiene una primera cita, es esencial crear un entorno en el que la chica se sienta segura y cómoda. Elige un lugar tranquilo y propicio para la conversación, como una acogedora cafetería o un parque. Fomenta una comunicación abierta y sincera escuchándola activamente y valorando sus opiniones. Al crear un espacio seguro, ella se sentirá más relajada y dispuesta a bajar la guardia.
Atravesar las defensas de la chica puede llevar tiempo y esfuerzo, pero siendo paciente, comprensivo y creando un entorno seguro, puedes ir desmontando poco a poco esos muros y construir una conexión más fuerte en vuestra primera cita.
6 Preguntas sobre la situación financiera – mal gusto
Cuando se tiene una primera cita, es importante mostrar verdadero interés por conocer a la otra persona. Sin embargo, hay ciertas preguntas que deben evitarse, ya que pueden parecer intrusivas o insensibles. Una de ellas es la situación financiera de la otra persona. He aquí seis preguntas sobre la situación financiera que se consideran de mal gusto:
Recuerda que la primera cita sirve para establecer una conexión y conocerse a nivel personal. Es importante respetar la intimidad y los límites del otro, evitando preguntas indiscretas sobre su situación financiera.
7 ¡Ríanse!
La risa es la clave del éxito de una primera cita. Ayuda a romper el hielo y crea un ambiente relajado y divertido. En lugar de ceñirse a una serie de normas rígidas, concéntrese en disfrutar del momento y dejar que fluyan las risas. Comparta anécdotas divertidas, cuente chistes o juegue a alguna tontería para que la conversación sea amena y entretenida.
Recuerde que no todo tiene que tomarse en serio en una primera cita. A todo el mundo le gusta reírse, y es una forma estupenda de conectar con tu cita a un nivel más profundo. La risa crea una energía positiva que puede ayudar a que ambos se sientan más cómodos y a gusto.
Si estás nervioso, utiliza el humor para rebajar la tensión. No pasa nada por reírse de uno mismo y no tomarse todo demasiado en serio. Mostrar tu lado genuino y juguetón hará que tu cita se sienta más a gusto y cómoda contigo.
Sin embargo, es importante saber interpretar la situación y respetar los límites de tu cita. No todo el mundo tiene el mismo sentido del humor, así que ten cuidado con lo que dices y asegúrate de que tus bromas no son ofensivas ni hirientes. El objetivo es pasarlo bien juntos, no incomodar al otro.
Así que, deja de lado cualquier idea preconcebida sobre cómo debe ser una primera cita y disfruta de la compañía del otro. Ríase libremente y diviértase: es la mejor manera de garantizar una primera cita memorable y satisfactoria.
8 Ni una gota de alcohol
Cuando se trata de la primera cita, aunque es habitual tomar una copa o dos para aliviar los nervios o animar el ambiente, es mejor evitar el alcohol por completo. He aquí por qué:
- Juicio claro: El alcohol altera el juicio, lo que puede llevar a tomar decisiones precipitadas o a decir cosas de las que luego te puedas arrepentir.
- Comportamiento inadecuado: Beber alcohol puede disminuir las inhibiciones y llevar a actuar de una manera que puede no ser apropiada para una primera cita.
- Salud y seguridad: Consumir alcohol puede mermar tu capacidad para tomar decisiones seguras y podría ponerte a ti o a tu cita en peligro.
- Conexión auténtica: Establecer una conexión auténtica con alguien requiere estar presente y comprometido. El alcohol puede obstaculizar la capacidad de conectar y conocerse de verdad.
- Problemas de abuso de sustancias: Si tú o tu cita habéis tenido problemas de adicción al alcohol en el pasado, es mejor evitar las situaciones desencadenantes.
- Mantener la cabeza despejada: La sobriedad te permite valorar la compatibilidad y evaluar si la persona es un buen partido sin la influencia del alcohol.
- Respeto mutuo: Al elegir no beber alcohol, muestras respeto por las preferencias de tu cita, especialmente si no bebe por motivos personales o religiosos.
- Opciones alternativas: Hay muchas ideas divertidas y creativas para citas sin alcohol que pueden ayudarte a disfrutar de la compañía del otro sin depender del alcohol.
Así que, para que la primera cita sea un éxito y memorable, considere la posibilidad de saltarse el alcohol y centrarse en conocerse de verdad.
9 Nunca llames primero
En el mundo moderno de las citas, navegar por las reglas no escritas de la comunicación puede resultar confuso. Un consejo común es no llamar nunca después de la primera cita. Si bien esto puede parecer un juego para jugar, en realidad puede conducir a conexiones perdidas y malentendidos.
1. 1. Da lugar a señales confusas: Evitar llamar primero puede crear confusión y señales contradictorias. Si ambas partes están esperando que el otro haga el primer movimiento, puede conducir a oportunidades perdidas para construir una conexión.
2. 2. Crea un estrés innecesario: Si te atienes a la regla de no llamar nunca primero, puede que te encuentres constantemente analizando la situación y estresándote sobre cuándo es el momento adecuado para dar el primer paso. Este estrés innecesario puede quitarte el disfrute de llegar a conocer a alguien.
3. Cuando te niegas a llamar primero, puedes estar perdiendo la oportunidad de expresar tu interés y establecer una conexión más profunda. Iniciar la comunicación demuestra a la otra persona que estás interesado en conocerla mejor.
4. Pérdida de tiempo : Si esperas a que la otra persona llame, puedes acabar perdiendo el tiempo suspirando por alguien que quizá no tenga las mismas intenciones ni el mismo interés que tú. Tomar la iniciativa de llamar primero puede ayudarte a determinar rápidamente si existe potencial para una relación significativa.
5. Asume roles de género anticuados : La idea de que la persona que inició la cita debe ser la que haga la primera llamada se basa en roles de género anticuados. En la sociedad progresista de hoy en día, es importante desafiar estas normas y comunicarse con honestidad y autenticidad.
6. Fomenta la confianza: Tomar la iniciativa de llamar primero puede ser un ejercicio de fomento de la confianza. Demuestra que estás dispuesto a correr riesgos y a exponerte. Incluso si la otra persona no está interesada, puedes sentirte orgulloso de ti mismo por haber hecho el esfuerzo.
7. Muestra interés y entusiasmo : Llamar primero demuestra tu interés y entusiasmo por la otra persona. Le hace saber que lo has pasado bien y que quieres seguir conociéndola mejor. Esta comunicación abierta puede ayudar a establecer expectativas y fomentar una relación más sana.
8. Rompe las barreras de comunicación : La regla de no llamar nunca primero puede crear barreras innecesarias en la comunicación. Al romper esta regla, puedes promover conversaciones abiertas y honestas, que son esenciales para una relación exitosa.
9. En una relación sana, ambas partes deben sentirse cómodas asumiendo por igual la responsabilidad de iniciar la comunicación. Desafiando la anticuada regla de no llamar nunca primero, puedes fomentar una dinámica más equilibrada en la que ambos miembros de la pareja participen activamente en la construcción de la relación.
Conclusión
Aunque puede haber muchas «reglas» sobre las citas y la comunicación, es importante tener en cuenta las posibles consecuencias negativas de seguirlas ciegamente. Si nunca llamas primero, puedes perderte conexiones significativas y obstaculizar el desarrollo de una relación sana y abierta. No tengas miedo de desafiar estas normas y toma la iniciativa de hacer la primera llamada si te interesa alguien. Nunca se sabe adónde puede conducir.
PREGUNTAS FRECUENTES
¿Debo esperar a que el chico dé el primer paso?
No, no hace falta esperar a que el chico dé el primer paso. Estamos en 2021, y los roles de género son cosa del pasado. Si te interesa alguien, no tengas miedo de tomar la iniciativa e invitarle a salir.
¿Es importante seguir las reglas tradicionales de las citas?
No, las reglas tradicionales están anticuadas y a menudo no tienen sentido. Es más importante ser uno mismo y hacer lo que a uno le parezca bien. Si quieres enviarle un mensaje de texto después de la cita en vez de esperar tres días, ¡hazlo!
¿Debo hacerme el difícil?
No, hacerse el difícil es un juego que suele llevar a confusiones y señales contradictorias. En lugar de jugar, sé sincero y abierto con tus sentimientos. Si te interesa alguien, díselo.
¿Está bien hablar de temas serios en la primera cita?
En general, es mejor mantener una conversación ligera y divertida en la primera cita. Deja los temas serios para más adelante, cuando os conozcáis mejor. Sin embargo, si un tema serio surge de forma natural y te sientes cómodo hablándolo, no hay razón para evitarlo.