Quiero hacerme un piercing – 5 mitos sobre los piercings que hace tiempo que deberían haberse disipado

Quiero hacerme un piercing: 5 mitos sobre los piercings que hace tiempo que deberían haberse disipado

Los piercings han sido una forma popular de modificación corporal durante siglos, pero siguen estando rodeados de ideas erróneas. Es hora de aclarar las cosas y desmentir algunos de los mitos más comunes que rodean a los piercings. Tanto si eres un entusiasta de los piercings como si estás pensando en hacerte el primero, es importante separar la realidad de la ficción para tomar decisiones con conocimiento de causa.

Mito nº 1: Los piercings son sólo para personas rebeldes o subculturas alternativas. Esto no es cierto. Los piercings son cada vez más comunes y se pueden encontrar en personas de todas las profesiones y condiciones sociales. Desde famosos a profesionales, los piercings son una expresión personal de estilo e individualidad, más que un reflejo de la personalidad o el estilo de vida de cada uno.

Mito nº 2: Los piercings son muy dolorosos y tardan mucho en curar. Aunque la perforación conlleva cierta incomodidad, a menudo se sobreestima el dolor. La sensación varía en función de la ubicación del piercing y de la tolerancia individual al dolor. Con los cuidados adecuados, la mayoría de los piercings se curan en unas semanas o unos meses, dependiendo del tipo.

Mito nº 3: Los piercings aumentan el riesgo de infecciones y otras complicaciones de salud. Aunque cualquier modificación corporal conlleva un riesgo potencial de infección, cuando la realiza un perforador profesional con material estéril, el riesgo se reduce al mínimo. Unos cuidados posteriores adecuados, como limpiar el piercing y evitar tocarlo con las manos sucias, pueden reducir aún más el riesgo de infecciones. Es importante seguir las instrucciones del perforador para garantizar una cicatrización adecuada.

Mito nº 4: Los piercings son permanentes y no se pueden quitar. Lo bueno de los piercings es que no son permanentes. Si decides que un piercing ya no se ajusta a tu estilo o preferencias, puedes quitártelo sin más. Sin embargo, es fundamental dejar que el piercing cicatrice por completo antes de quitarlo para evitar complicaciones o cicatrices. Algunos piercings pueden dejar una pequeña marca o cicatriz, pero suelen ser mínimas y desaparecer con el tiempo.

Mito nº 5: Los piercings se limitan a determinadas zonas del cuerpo. Aunque ciertas zonas, como las orejas, la nariz y el ombligo, suelen ser las más perforadas, prácticamente no hay límites en cuanto a dónde puede hacerse un piercing. Desde las cejas hasta la lengua, los pezones e incluso las zonas íntimas, los piercings pueden colocarse en casi cualquier parte del cuerpo. La elección de la ubicación del piercing debe guiarse por las preferencias personales, la anatomía y el consejo de un perforador profesional.

Una vez disipados estos mitos, está claro que los piercings son una forma versátil y personal de expresión personal. Tanto si eliges un simple piercing en el lóbulo de la oreja como si optas por colocaciones más exclusivas, los piercings pueden añadir un toque de individualidad a tu estilo y ayudarte a abrazar tu verdadero yo.

1 Los piercings son para adolescentes

Uno de los mitos más extendidos sobre los piercings es la creencia de que son sólo para adolescentes. Si bien es cierto que muchos adolescentes se hacen piercings como forma de autoexpresión y rebeldía, los piercings no se limitan a este grupo de edad. Personas de todas las edades, desde niños pequeños hasta adultos mayores, deciden hacerse piercings por diversas razones.

Los piercings forman parte de la cultura humana desde hace miles de años y se han visto en distintas sociedades y grupos de edad a lo largo de la historia. En algunas culturas, los piercings tienen un significado cultural o religioso e incluso se practican en bebés como parte de rituales tradicionales.

Además, los piercings pueden tener beneficios prácticos para personas de todas las edades. Por ejemplo, algunos adultos se hacen piercings para aliviar problemas médicos, como las migrañas o la ansiedad. Estos piercings, conocidos como daith o tragus piercings, se dirigen a puntos de presión específicos para proporcionar alivio.

Es importante recordar que los piercings son una elección personal y no se limitan a un grupo de edad concreto. Tanto si eres adolescente como adulto, es importante que investigues y tengas en cuenta los posibles riesgos y beneficios antes de hacerte un piercing.

2 El piercing siempre duele

Un mito común sobre los piercings es que siempre duelen. Si bien es cierto que hacerse un piercing implica cierto nivel de incomodidad, la cantidad de dolor que se experimenta puede variar mucho en función de varios factores.

Umbral de dolor

Cada persona tiene un umbral de dolor diferente, lo que significa que lo que puede ser doloroso para una persona puede ser tolerable para otra. Algunos individuos tienen una mayor tolerancia al dolor y son capaces de soportar el proceso con mínimas molestias, mientras que otros pueden encontrarlo más doloroso.

Colocación y técnica

Colocación y técnica

La ubicación del piercing y la técnica utilizada también pueden influir en el nivel de dolor. Algunas zonas del cuerpo tienen más terminaciones nerviosas o una piel más gruesa, lo que puede hacer más incómodo el proceso de perforación. Además, la habilidad y experiencia del perforador pueden influir en el nivel de dolor que se sienta durante el procedimiento.

Es importante elegir un perforador profesional y de confianza que siga los protocolos de higiene y seguridad adecuados.

Cuidados posteriores

Unos cuidados posteriores adecuados desempeñan un papel importante en el proceso de cicatrización y en la comodidad general del piercing. Si no se tienen los cuidados adecuados, el piercing puede infectarse o irritarse, lo que aumentaría el dolor y las molestias. Seguir las instrucciones del perforador para limpiar y cuidar el piercing puede ayudar a minimizar el dolor y favorecer la cicatrización.

Aunque es normal experimentar algunas molestias durante el periodo inicial de cicatrización, el dolor debería remitir gradualmente a medida que el piercing cicatriza y se adapta a tu cuerpo.

En conclusión, aunque hacerse un piercing implica cierto grado de incomodidad, el dolor experimentado puede variar mucho en función de factores individuales como la tolerancia al dolor, la colocación, la técnica y los cuidados posteriores. Con una preparación adecuada, el perforador adecuado y unos cuidados posteriores esmerados, el dolor puede reducirse al mínimo y la experiencia general del piercing puede ser más cómoda. No dejes que el miedo al dolor te disuada de hacerte un piercing si es algo que te interesa.

3 El piercing se hace con una pistola

3 El piercing se hace con pistola

Una de las ideas erróneas más comunes sobre los piercings es que se utiliza una pistola para el proceso de perforación. Hay que acabar con este mito, ya que puede llevar a la desinformación y a posibles daños.

La verdad es que los piercers profesionales nunca utilizan pistolas para realizar piercings. Las pistolas sólo son apropiadas para los lóbulos, pero incluso entonces pueden causar daños y complicaciones. Para cualquier otro tipo de piercing, como los de cartílago o los corporales, el método preferido es la aguja.

Utilizar una pistola para perforar puede causar un traumatismo innecesario en el tejido y aumentar el riesgo de infección. Las pistolas empujan con fuerza un clavo romo a través de la piel, lo que puede provocar desgarros y daños en la zona circundante.

En cambio, los piercers profesionales utilizan agujas huecas que extraen un pequeño núcleo de tejido, creando un orificio limpio y preciso. Este método minimiza el traumatismo y reduce las posibilidades de complicaciones.

¿Por qué la gente cree que se utilizan pistolas para hacer piercings?

¿Por qué la gente cree que se utilizan pistolas para hacer piercings?

La creencia de que se utilizan pistolas para hacer piercings puede deberse a ideas erróneas perpetuadas por personas sin formación o a prácticas anticuadas. En el pasado, las pistolas se utilizaban con más frecuencia para los piercings, pero el sector ha evolucionado y ahora los perforadores profesionales hacen hincapié en la seguridad y en las técnicas adecuadas.

¿Cuáles son los riesgos de utilizar una pistola para perforar?

Utilizar una pistola para perforar conlleva varios riesgos, entre ellos

  • Traumatismos y daños en los tejidos
  • Infección debido a la fuerza con que se perfora.
  • Colocación incorrecta de la joya
  • Dificultad de cicatrización y tiempo de recuperación prolongado
  • Posibilidad de complicaciones a largo plazo

Es fundamental investigar y elegir un perforador de confianza que siga prácticas seguras y utilice técnicas adecuadas para minimizar estos riesgos. Tomarse el tiempo necesario para informarse y acabar con los mitos es esencial para cualquiera que esté pensando en hacerse un piercing.

4 Los piercings no siempre son seguros

Aunque los piercings pueden ser una forma estupenda de expresar individualidad y estilo personal, es importante entender que no están exentos de riesgos. Mucha gente asume que todos los piercings son seguros, pero no siempre es así. He aquí algunas ideas erróneas sobre la seguridad de los piercings:

Los piercings no están totalmente exentos de riesgos

Contrariamente a la creencia popular, los piercings no están totalmente exentos de riesgos. Como cualquier otro tipo de modificación corporal, siempre existe la posibilidad de complicaciones. No hay que subestimar el riesgo de infección, cicatrices, reacciones alérgicas y lesiones nerviosas.

Un equipo poco limpio puede provocar infecciones

Un equipo poco limpio puede provocar infecciones

Uno de los mayores riesgos asociados a los piercings son las infecciones. Si el equipo utilizado durante el proceso de perforación no se limpia y esteriliza adecuadamente, puede introducir bacterias en la herida. Esto puede provocar diversas infecciones, como celulitis y abscesos.

Es importante elegir un estudio de piercing de confianza que siga unos procedimientos sanitarios estrictos. Asegúrate de que el perforador utiliza agujas de un solo uso y de que todo el equipo se esteriliza correctamente antes de su uso.

Los cuidados posteriores inadecuados pueden provocar complicaciones

Los cuidados posteriores desempeñan un papel crucial en el proceso de cicatrización de un piercing. Si no se limpia y cuida adecuadamente un piercing nuevo, pueden surgir complicaciones como infecciones, un tiempo de cicatrización prolongado y cicatrices. Es importante seguir las instrucciones del profesional y mantener el piercing limpio y protegido.

Utilizar soluciones de limpieza agresivas, tocar el piercing con las manos sucias o cambiar las joyas demasiado pronto puede aumentar el riesgo de complicaciones. Es importante ser paciente y dejar que el piercing cicatrice correctamente antes de intentar cualquier cambio.

No todos los piercers son igual de expertos

Otro factor que puede afectar a la seguridad de los piercings es la habilidad y experiencia del perforador. Aunque hay muchos piercers profesionales y con talento, también los hay que no tienen la formación o los conocimientos necesarios.

Elegir un perforador con la formación, la licencia y la experiencia adecuadas puede reducir en gran medida el riesgo de complicaciones. Tómate tu tiempo para investigar diferentes estudios de piercing, leer opiniones y pedir recomendaciones antes de tomar una decisión.

En general, aunque los piercings pueden ser una forma divertida y emocionante de expresarse, es importante abordarlos con precaución. Entender los riesgos potenciales y tomar las precauciones necesarias puede ayudar a garantizar una experiencia de piercing segura y satisfactoria.

5 Los piercings tardan un año en cicatrizar

Uno de los mitos más extendidos sobre los piercings es que tardan un año en cicatrizar por completo. Si bien es cierto que algunos piercings pueden tardar más en cicatrizar que otros, el tiempo de cicatrización puede variar en función de varios factores.

En primer lugar, la ubicación del piercing desempeña un papel importante en el proceso de cicatrización. Los piercings situados en zonas con mayor flujo sanguíneo, como los lóbulos de las orejas, pueden cicatrizar más rápidamente que los situados en zonas con menor flujo sanguíneo, como el cartílago de la oreja o el ombligo.

En segundo lugar, unos cuidados posteriores adecuados son cruciales para el proceso de cicatrización. Si el piercing no se mantiene limpio y cuidado, puede tardar más en cicatrizar. Seguir las instrucciones de cuidados posteriores proporcionadas por un perforador profesional es esencial para favorecer la cicatrización y prevenir infecciones.

Además, hay factores individuales que pueden afectar al tiempo de cicatrización de un piercing. El organismo de cada persona cicatriza a un ritmo diferente, de modo que lo que a una persona le puede llevar un año, a otra le puede llevar menos tiempo. Factores como la edad, el estado general de salud y el funcionamiento del sistema inmunitario pueden influir en la rapidez de cicatrización de un piercing.

Es importante tener en cuenta que algunos piercings pueden requerir más tiempo para cicatrizar completamente. Los piercings complejos, como los piercings industriales o los piercings linguales, pueden tardar más debido a la naturaleza del piercing y a la cantidad de tejido implicado.

En conclusión, aunque es una creencia común que los piercings tardan aproximadamente un año en cicatrizar, el tiempo de cicatrización puede variar en función de varios factores. La ubicación del piercing, los cuidados postoperatorios adecuados y factores individuales influyen en el tiempo que tarda en cicatrizar un piercing. Es esencial consultar con un perforador profesional y seguir sus instrucciones de cuidados posteriores para obtener el mejor resultado de cicatrización.

PREGUNTAS FRECUENTES

¿Los piercings son una modificación permanente del cuerpo?

No, los piercings no son modificaciones permanentes del cuerpo. Pueden quitarse fácilmente si se desea.

¿Los piercings siempre provocan infecciones?

No, los piercings no siempre provocan infecciones. Con los cuidados y la higiene adecuados, el riesgo de infección puede reducirse al mínimo.

¿Todos los piercings causan mucho dolor?

No, no todos los piercings causan mucho dolor. Los niveles de dolor pueden variar en función de la tolerancia al dolor de cada persona y de la zona perforada.

¿Los piercings sólo pueden hacerse en determinadas partes del cuerpo?

No, los piercings pueden hacerse en varias partes del cuerpo, como las orejas, la nariz, las cejas, los labios, la lengua, el ombligo e incluso las zonas íntimas.

¿Es cierto que todos los piercings pueden dar lugar a complicaciones?

No, no todos los piercings pueden dar lugar a complicaciones. Aunque siempre existe un riesgo, seguir las instrucciones de cuidados postoperatorios adecuadas y dejarse perforar por un profesional puede reducir al mínimo las posibilidades de complicaciones.

¿Es cierto que hacerse un piercing es extremadamente doloroso?

No, hacerse un piercing no es extremadamente doloroso. Aunque puede haber alguna molestia durante el proceso, el dolor suele ser breve y tolerable. El nivel de dolor también varía en función de la ubicación del piercing y de la tolerancia individual al dolor.

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